Quieren que creamos
que estamos contaminados
de nosotros mismos
que estamos contaminados por la vida
por la alegría
por las esperanzas
por la ilusión
por la libertad
por la bondad
por eso nos quieren enterrar y encerrar
y volver nuestra vida una gran prisión
permiso para salir
permiso para amar
permiso para vivir
permiso para soñar
No, no le tememos a la vida
ni a las caricias
ni a las sonrisas
ni a una reunión de hermanos
ni a un apretón de manos
Tenemos 380 trillones de virus
en nuestro cuerpo
y hay más virus en la tierra
que estrellas en el cielo
¿Quién es tan ingenuo
como para creer
que encerrándonos detrás de una puerta
o tras de una mascarilla
vamos a alejar un solo virus
de eso trillones
con los que convivimos?
No puede ser
no nos podemos
contaminar de nosotros mismos
los mercaderes del engaño
usan lo invisible
para lograr lo imposible
encerrarnos, debilitarnos, aniquilarnos,
no podemos creer en el poder
de un solo virus
porque el estado nos lo ha revelado,
es hora de soltar las cadenas
de apagar las mentiras
de vivir la vida
sin un estado que no nos representa
sino que por el contrario
nos asesina, nos tortura,
nos atormenta, nos encierra,
recuperemos ya nuestras vidas,
¡existo, luego resisto!