es pintarse la palma de la mano de rojo
y dejar una huella en una roca
para que alguien la encontrara
50 mil años más tarde
y volvernos uno solo con el universo
ser humanos es soñar
que hay más allá de las estrellas
y qué nos espera del otro lado del silencio
cuando la muerte nos recoja
con las hojas de otoño
en nuestra huerta
ser humanos es amar intensamente
el viento contra la piel,
la nube viajera,
las sombras doradas de la tarde,
los pájaros que cantan a la vida
desde las ramas de una ceiba,
ser humanos es besar tus labios
y derretirse como la cera de una vela
en el fuego lento de una quimera,
ser humanos es aprender a perdonar
a reconocer nuestras propias ofensas
a marchar por el camino de espinas
aunque el camino florido
sea más hermoso y rápido
pero vacío de las cicatrices
que nos enseñan a valorar mejor
lo bello y lo inconcluso
lo tierno y lo amargo
la ternura y la tensión
la fortuna y la suerte
la vida y la aventura
la pasión y la muerte…
Ser humanos es
irse con el atardecer
y saber que del otro lado
de las sombras
nos esperan sonrientes
todas aquellas personas
que nos enseñaron con su bondad,
con su sonrisa, con su humanidad
a ser humanos
ser humanos
es contemplar nuestra propia huella
tocada por la de aquellas manos
que hace miles de años
alumbraron en una caverna oscura
lo que sería también
nuestro paso por la vida…