No sé cómo me imagines,
pero no soy así,
soy un temporal
en un vaso de agua
un salto al vacío
desde 30 centímetros de altura
una tormenta de algodón y miel
en el centro de tu corazón.
Puedes imaginarme como quieras,
pero soy otro,
soy el perro fiel que te ve partir
con lágrimas en los ojos,
soy el que nunca vuelve
porque nunca me fui,
soy la sombra que se desliza
por tus sueños,
soy los gatos que deambulan por la noche
y que no tienen dueños.
No sé cómo quieres que sea,
pero tampoco soy así,
soy la moneda que cae parada
cuando la lanzan al aire,
soy la ráfaga que entra por tu ventana
trayendo una pluma que perdió su pájaro,
soy el agua que baja por la montaña
contándole sus secretos a la luna.
Y ahora que sabes cómo soy,
pues tampoco soy así,
soy un gigante
de las cosas pequeñas,
soy un nido
para los que llegan
y la estación de partida
para los que se alejan,
soy lago calmado
y mar embravecido,
soy cada cosa y su contrario
soy y no soy
soy amor y desesperanza,
pero jamás seré olvido…
