Gatos que se me atraviesan
En medio de la noche
Como si fueran perseguidos
Por sus propios fantasmas
Corren asustados de su sombra
Tienen pánico de luna
Calambre de estrellas
Huyen despavoridos
Como si sus mismas colas
Los persiguieran
Rápidos como flechas
Se disparan
De un lado a otro de la calle
Para ir a clavarse
En la primera sombra que pasa
Es difícil evitarlos
Y más difícil contarlos
Vuelan como estrellas fugaces
De jardín en jardín
De cielo en cielo
Caen como melocotones
De cercas y tejados
La noche cosecha
Murciélagos y gatos
Vienen en todos los colores
Que no nos deja ver la noche
Algunos son de un blanco aceituna
Otros son de blanquecina negrura
Hay gatos multicolores
En todos los tonos de gris
Con manchas de mediodía
A la altura de la cola
Huyen asustados
Como si acabaran de cometer un crimen
O de descubrir el pecado
No sé cómo lo hacen
Pero desaparecen
Y se funden
Con las sombras de la noche
Y al llegar la luz del día
Reaparecen
Con cara de inocencia
Hechos una pelota de sueños
Como si nada hubiera pasado…
