Tal vez no todo el mundo
conoció la magia de tu ser
la alegría infinita
que se escondía
detrás de tu sonrisa
ni tus manos de alfarero
de palabras
de creador de mundos
insospechados
por los que recorrías
el tiempo,
sin futuro ni presente ni pasado
tú lo dabas todo
a cambio de nada
navegabas la tierra
como una blanca pluma celeste
que recorría el infinito
dejando su huella galáctica
en cada átomo que tocaba,
hoy te canto a ti
recordando cómo llegaste
a este mundo hace 44 años
en un parto que más que parto
fue como la llegada de un ángel
frágil, tierno, misterioso
que se abriría al mundo
como la flor más exótica
de esta selva universal
llena de emociones
aromas y colores nunca vistos
hoy te canto a ti
porque sé que seguirás con nosotros
hasta el final de este recorrido eterno y tierno…
