No queda nada por decir,
Los poetas ya lo han dicho todo,
No ha quedado rosa
Ni luna llena
Que no hayan bombardeado
A versos
Hay cráteres de poesía
Y rosas desplumadas
Por toda la geografía
Longitudinal del pensamiento
Los poemas de amor
Se desangran
Por calles y avenidas
Confundidos con el neón
Y mezclados con el cemento
Todos los juglares
Están presos
En cárceles de melancolía
Y los libros de poemas
Yacen colgados de los árboles
Linchados por catálogos,
Acuchillados por telenovelas
Y decapitados con la guillotina
De bestsellers, revistas
Y demás plagas bubónicas
Disfrazadas de pensamiento.
Todo lo que había que decir
Fue sepultado
Bajo toneladas de desechos
De palabras de plástico
Artículos de afilado vidrio
Revistas de ladrillo molido
Folletines de asfalto derretido
Por eso, y mucho más
Me declaro vencido
El próximo poema que escriba
Tendrá piel de culebra
Garras de águila harpía
Cuernos de toro bravo
Y aún así,
No sé si sobreviva
La avalancha de
Ignorancia ilustrada
Que los mercaderes de la palabra
Publican día a día por editoriales
Y alcantarillas…
